Avempace
En realidad se llamaba Abu Bakr Muhammad ibn Yahya ibn al-Sa'ig ibn Bayyah. Pero todo el mundo le conocía como Avempace. Fue un filósofo hispano andalusí que nacio en Zaragoza a finales del siglo XI... y murió en Fez en 1138.
La ciudad apenas se había desarrollado mas de lo que fue la CesarAugusta romana. La influencia visigoda no fue escasa, sino nula. Pasó a llamarse Saraqusta o mas exactamente Medina Albaida Saraqusta, la Ciudad Blanca Saraqusta, (en plan Señor de los Anillos), por sus nuevos dueños, el califato de Córdoba. Era frontera con los territorios cristianos de mas al norte, de los que recibió tributos durante varios siglos. Sin embargo para la época que vivió Avempace, el califato había caido en una guerra civil y el territorio alrededor de Saraqusta se había independizado en una de las muchas Taifas que se formaron. Su zona de influencia abarcaba desde el pre-Pirineo al norte, Lérida por el este, hasta el mediterráneo cerca de la Taifa de Valencia por el sur, y hasta Tudela y Calatayud por el oeste. Mas debil militarmente, pero mas desarrollada culturalmente. Aparte de la zona antigua romana, con su muralla de piedra, habían surgido algunos asentamientos en la zona externa, protegidos por un muro de tapial (que no es mas que un muro de tierra compactada reforzada por una armazón de madera), junto con una amplia zona de huertas. El propósito de este muro no era defensivo, sino mas bien para controlar la entrada y salida de gente de la ciudad.
Inciso - (Si es que basta hacer un agujero en cualquier parte de Zaragoza, para que salgan restos arqueológicos.) - fin del inciso.
Durante este reino independiente la dinastía Hudid o Banu Hudse contruyó el palacio de la Aljafería, en las afueras de la ciudad, como lugar de ocio y recreo de la familia gobernante, en imitación de los palacios sirios de la dinastía Omeya. Lleno de fuentes, jardines, porches, representaba el ideal de fortaleza cultural y científica que buscaban en esa época en contraposición con los reinos mas salvajes del norte. Amantes de la filosofía, las artes, mecenas de todo tipo de representaciones culturales (bueno, de las permitidas por el Islam), apoyaron la creación de escuelas, bibliotecas, librerías...
En ese contexto vivió Avempace. Nacido en familia humilde, fue filósofo, médico, músico, poeta, astrónomo, un auténtico erudito, un sabio en todo el significado de la palabra, el primer representante europeo de la recuperación de los textos antiguos de Aristóteles y Platón. También fue maestro de Averroes, entre los dos tradujeron multitud de obras de Aristóteles, y era muy considerado por sus contemporáneos, incluso por sus críticos. Representó un buen intento de unificar el racionalismo y el misticismo dentro del contexto islámico. Incluso Santo Tomas de Aquino lo nombra, aunque sea para criticarle. Como es lógico no se conserva ningun retrato ni dibujo ni representación suya. En otra época pudo haber llegado muy lejos. En otro contexto pudo haber sido un Leonardo.
Desgraciadamente vivió en malos tiempos. Con la llegada de los invasores almorávides, se reunificó durante un tiempo la península, pero por poco tiempo. En 1118, con la conquista de la ciudad por el rey cristiano Alfonso I el conquistador, tuvo que emigrar. Fue pasando por diversas ciudades, cada vez mas al sur, hasta que en Fez, Marruecos, murió, posiblemente envenenado por médicos rivales, en el año 1139, o 533 según su calendario.
Vínculo
La ciudad apenas se había desarrollado mas de lo que fue la CesarAugusta romana. La influencia visigoda no fue escasa, sino nula. Pasó a llamarse Saraqusta o mas exactamente Medina Albaida Saraqusta, la Ciudad Blanca Saraqusta, (en plan Señor de los Anillos), por sus nuevos dueños, el califato de Córdoba. Era frontera con los territorios cristianos de mas al norte, de los que recibió tributos durante varios siglos. Sin embargo para la época que vivió Avempace, el califato había caido en una guerra civil y el territorio alrededor de Saraqusta se había independizado en una de las muchas Taifas que se formaron. Su zona de influencia abarcaba desde el pre-Pirineo al norte, Lérida por el este, hasta el mediterráneo cerca de la Taifa de Valencia por el sur, y hasta Tudela y Calatayud por el oeste. Mas debil militarmente, pero mas desarrollada culturalmente. Aparte de la zona antigua romana, con su muralla de piedra, habían surgido algunos asentamientos en la zona externa, protegidos por un muro de tapial (que no es mas que un muro de tierra compactada reforzada por una armazón de madera), junto con una amplia zona de huertas. El propósito de este muro no era defensivo, sino mas bien para controlar la entrada y salida de gente de la ciudad.
Inciso - (Si es que basta hacer un agujero en cualquier parte de Zaragoza, para que salgan restos arqueológicos.) - fin del inciso.
Durante este reino independiente la dinastía Hudid o Banu Hudse contruyó el palacio de la Aljafería, en las afueras de la ciudad, como lugar de ocio y recreo de la familia gobernante, en imitación de los palacios sirios de la dinastía Omeya. Lleno de fuentes, jardines, porches, representaba el ideal de fortaleza cultural y científica que buscaban en esa época en contraposición con los reinos mas salvajes del norte. Amantes de la filosofía, las artes, mecenas de todo tipo de representaciones culturales (bueno, de las permitidas por el Islam), apoyaron la creación de escuelas, bibliotecas, librerías...
En ese contexto vivió Avempace. Nacido en familia humilde, fue filósofo, médico, músico, poeta, astrónomo, un auténtico erudito, un sabio en todo el significado de la palabra, el primer representante europeo de la recuperación de los textos antiguos de Aristóteles y Platón. También fue maestro de Averroes, entre los dos tradujeron multitud de obras de Aristóteles, y era muy considerado por sus contemporáneos, incluso por sus críticos. Representó un buen intento de unificar el racionalismo y el misticismo dentro del contexto islámico. Incluso Santo Tomas de Aquino lo nombra, aunque sea para criticarle. Como es lógico no se conserva ningun retrato ni dibujo ni representación suya. En otra época pudo haber llegado muy lejos. En otro contexto pudo haber sido un Leonardo.
Desgraciadamente vivió en malos tiempos. Con la llegada de los invasores almorávides, se reunificó durante un tiempo la península, pero por poco tiempo. En 1118, con la conquista de la ciudad por el rey cristiano Alfonso I el conquistador, tuvo que emigrar. Fue pasando por diversas ciudades, cada vez mas al sur, hasta que en Fez, Marruecos, murió, posiblemente envenenado por médicos rivales, en el año 1139, o 533 según su calendario.
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Aish, cómo me gusta la historia...
Es curioso que las ciudades que los árabes fundaron en España fueron más culturales que militares. Una muestra es Medina Azahara, de la que tengo un grato recuerdo. Vale la pena visitarla porque es un buen ejemplo de cómo eran las ciudades árabes en la antigüedad: mármol, jardines... En fin, una belleza. pero llegaron los bárbaros (los católicos) y lo destruyeron. Qué cosa que los que antes eran más eruditos ahora...
Que post tan instructivo, toda una lección.
Abrazos!
Gracias :)
Pues eso, es lo que pasa, que la cultura y la prosperidad solo aparece en tiempos de paz, y las guerras solo traen riqueza para unos pocos. Alli tuvieron prosperidad, porque, a pesar de que el Islam es una religión muy estricta, en esa época fue tolerante, al contrario que ahora.